...Y oigo que suena una campana, y luego otra y otra, y todas las campanas de la catedral y las campanas de toda la ciudad. Nunca tan profundo, tan alto, tan triste y tan solemne, tan de la tierra y tan del cielo…. Suenan, suenan y repiten Cardenal, Arzobispo, Stepinac, Krašić, Zagreb, Croacia, hogar, las estrellas, Croacia dispersa por el mundo, mártir, beato, santo, murió, vive, murió, vive. ¡Son campanas de Resurrección!
Un estremecimiento me traspasa el cuerpo, el corazón, el alma… ¿llorar o cantar? ¿Réquiem o aleluya?
Siempre viven en mí esos momentos dramáticos; un río de gente, un torrente que llega desde arriba y desde abajo, todos confluyen en la catedral. Esperan estremecidos, ansiosos, conmovidos, orgullosos.